Mostrando entradas con la etiqueta castelo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta castelo. Mostrar todas las entradas

jueves, 9 de junio de 2011

La plantilla de Castelo destinará un 10% de su salario para comprar la empresa

Esta noticia aparece en el faro de vigo, y sinceramente me deja un sabor agridulce. Por una parte es una buena noticia que los trabajadores defiendan su puesto de trabajo, implicándose en la empresa hasta el punto de adquirirla y reservar un porcentaje de sus salarios para su capitalización, pero es una empresa arriesgada por varios motivos, dado la situación del sector de la obra publica en España, los márgenes de beneficio con los que se trabaja actualmente, que el administrador concursal va a vigilar, y por los entre 30 y 40 millones de euros de carga hipotecaria (que tendran alguna más) que arrastra las factorias. Y con ese millón y medio de euros de capitalización que consiguen para dos/tres años y tres factorias de prefabricados es poco, considerando los plazos de pago de la Administración, que se pasan la ley de morosidad por donde no os voy a decir ahora mismo. Que tengan mucha suerte, que tristemente les va a hacer mucha falta.
La asamblea de trabajadores del Grupo Castelo aprobó ayer en Porriño reservar un 10% de su salario durante los próximos dos o tres años para capitalizar la sociedad anónima laboral (SAL) con la que quieren comprar las plantas de Porriño, Coirós y Ocaña (Toledo). Los más de 160 empleados que se han anotado a la SAL calculan con esta medida alcanzar un capital social de 1,5 millones de euros. El conselleiro de Industria, Javier Guerra, se comprometió hace dos semanas a colaborar con la plantilla facilitando circulante para las futuras operaciones.
Trabajadores de los centros de Porriño y Coirós (en A Coruña) mantuvieron ayer una reunión en Porriño, organizada por MCA UGT, para analizar la situación en la que se encuentran las negociaciones. La plantilla optó por la constitución de una SAL el pasado febrero como única vía para mantener sus puestos de trabajo y hacerse con las tres plantas más rentables del grupo Castelo, en concurso de acreedores al no haber sido capaz de llegar a un acuerdo con los bancos el año pasado. Esta compañía se dedica a la producción de prefabricados de hormigón.
Fuentes próximas a las negociaciones señalaron a FARO que la carga hipotecaria de las tres factorías a las que aspira la plantilla ronda entre los 30 y 40 millones de euros. Según el plan diseñado por los trabajadores, estos mantendrían sus actuales derechos laborales en la SAL y reservarían el 10% de sus futuros sueldos para capitalizar la sociedad. Hasta el momento, algo más de 160 empleados ya han dado el visto bueno a la SAL, pero el número podría aumentar. El plazo para apuntarse o borrarse de la SAL acaba el próximo 10 de enero.
La plantilla cuenta además con el respaldo de la Consellería de Economía e Industria y el alcalde de Porriño. "Valoramos el compromiso del conselleiro con los trabajadores, y esperamos que cumpla con lo dicho", afirmó Diego Atanes, secretario comarcal de MCA-UGT.
Los trabajadores de Castelo argumentan que la SAL es la única posibilidad de evitar la liquidación de la empresa, ya que está descartado que los antiguos administradores puedan alcanzar un acuerdo con las entidades financieras acreedores. Castelo es una de las firmas del emporio fundado por Pérez Leirós y que da trabajo a más de 300 personas en Galicia.

martes, 24 de mayo de 2011

160 trabajadores del Grupo Castelo pretenden cerrar la compra de la empresa antes de agosto

Una noticia del Faro de Vigo que me llama la atención. Como lucha la gente por sus puestos de trabajo, porque la verdad es que como está el sector, hay que adelgazar mucho los costes para poder trabajar y más en la obra pública, porque hay muy poco. Imagino que el AVE a Galicia será un empujon a los pedidos de Castelo, pero los competidores no lo pondrán fácil. Eso sí, si la Xunta entra en el capital (pone pasta), avala (más pasta) y financia el circulante (más pasta) es todo más facil. Si la tiene, claro.
Solo quieren las fábricas y no os terrenos (normal) pero los bancos dudo que acepten (normal tambien). Suerte a todos.
Ciento sesenta trabajadores del Grupo Castelo –de los 240 que tenía la empresa antes de entrar en suspensión de pagos– pretenden que la Sociedad Anónima Laboral (SAL) que han constituido cierre la compra de tres de los centros productivos de la compañía antes de agosto. Las instalaciones que quieren incorporar a la nueva sociedad, que se denominará Castelo Soluciones Estructurales, están ubicadas en Porriño, Ocaña (Toledo) y Coirós (Betanzos).
Representantes de los trabajadores adscritos a la SAL, representados por MCA-UGT, mantuvieron este fin de semana un encuentro con el conselleiro de Industria, Javier Guerra, al que le plantearon la necesidad de que la Xunta se implique directamente en apoyar la operación. Entre las demandas de los trabajadores está la participación directa de Xes Galicia en el capital de la nueva empresa; avales técnicos del Igape para nuevas construcciones y el compromiso de financiación para el capital circulante y para aquellos aspectos derivados de la documentación de la operación de compra-venta.
Estas peticiones fueron asumidas por Javier Guerra que, sin embargo, no dejó claro si la Consellería de Industria intermediaría con los bancos acreedores para agilizar la venta en la que tienen también que aportar su dictamen los administradores concursales del Grupo Castelo.
La apuesta de los trabajadores por levantar la empresa está fundamentada en el gran posicionamiento que tiene el Grupo Castelo en el mercado nacional de prefabricados en hormigón para obras públicas. "A firma leva 6 meses en concurso de acreedores, mais outros 4 en preconcurso y arrastra certos problemas de liquidez. A pesar de esta situación síguese a contratar porque os trabajadores son muy cualificados e a empresa ten unha longa traxectoria no sector que parte do ano 1958", ("la firma lleva 6 meses en concurso de acreedores, más otros 4 en preconcurso y arrastra cieros problemas de liquidez.  A pesar de esta situación sigue contratando porque los trabajadores son muy cualificados y la empresa tiene una larga trayectoria en el sector que parte  del año 1.958" ) afirma Diego Atanes, secretario comarcal de Metal, Construcciones y Afines de UGT que sigue muy de cerca lo que está ocurriendo en esta empresa.
El reto que les falta ahora por superar a los 160 trabajadores que apuestan por levantar la nueva Castelo Soluciones Estructurales es la negociación con los bancos y con los administradores concursales para que se fije un precio asumible para poder hacerse cargo de la empresa. Los socios de la nueva empresa quieren que el precio se centre exclusivamente sobre los centros de producción de Porriño, Coirós y Ocaña y que queden fuera todos aquellos terrenos propiedad de la empresa que no son productivos.
Sin embargo, las entidades financieras acreedoras no muestran excesivo interés en facilitar las cosas. A finales del pasado mes de marzo, la representación de los trabajadores de la SAL convocó a las once entidades acreedoras a una reunión para alcanzar un acuerdo, sin embargo solo se presentaron tres, que encima son las que tienen una participación minoritaria de la deuda.
Los trabajadores del Grupo Castelo ven en la SAL la única posibilidad de de evitar la liquidación de la empresa, ya que está descartado que los antiguos administradores de la firma puedan alcanzar un acuerdo con las entidades financieras acreedores.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Ya quedan pocos Capitulo I. El Grupo Castelo, obligado a suspender pagos

Los prefabricados de hormigón son un sector que sigo con un interés algo más especial que al resto, y en este sector vamos de concurso en concurso. Ahora le toca a Castelo, hasta hace unos pocos años uno de los grupos más potentes del sector a nivel nacional, con 6 plantas de fabricación en España y dos en Portugal. Lo más triste es que levantar el concurso en la situación actual es practicamente imposible, sobretodo si hay inversiones fuertes, ya que el mercado no está para muchas alegrias, para detectar los margenes de beneficio necesitamos tecnología cúantica y el o los administradores concursales no se lo piensan mucho. 
Al grupo vigués Castelo, dedicado a la producción de prefabricados de hormigón, se le agotó el pasado viernes el plazo de tres meses del periodo preconcursal y se verá obligado a presentar en los próximos días el concurso de acreedores al no haber alcanzado un acuerdo de refinanciación de la deuda con once bancos, liderados por el Santander. La empresa trató de convencer a las entidades financieras y a la Xunta con un plan de viabilidad que fue rechazado por insuficiente, según fuentes de UGT.
El grupo, que había simplificado su estructura societaria a principios de año para ahorrar costes, cuenta con seis factorías en nuestro país, ubicadas en Coirós (A Coruña), O Porriño (Pontevedra) -una de prefabricados y otra de estructuras metálicas-, Ocaña (Toledo), Aspe (Alicante) y Andorra (Teruel). Controla además a la fabricante Talleres de Estructuras Metálicas (TEM) y Prefabricados Aspe, y a la constructora de estructuras metálicas Ibérica de Construcciones y Servicios Inmobiliarios. El grupo Castelo se completa en España con la división Abriga, que diseña y construye soluciones integrales para fachadas. Ya en el exterior cuenta con las fabricantes lusas PTN Prefabricados de Betao Torres Novas y Pregaia Oporto, la brasileña Pregaia do Brasil Premoldados, y las constructoras portuguesas Civibral (100%) y Maia & Maia (50%). Castelo, integrado a su vez en el grupo Pérez Leirós, ha visto descender drásticamente sus ventas que han pasado de los 181 M€ facturados en 2007 a los 112 M ingresados en 2009.
El Juzgado de lo Mercantil de Pontevedra aceptó el pasado mes de septiembre el preconcurso de acreedores que presentó el grupo. A partir de entonces la empresa con plantas en Porriño, Coirós (A Coruña), Ocaña (Toledo), Andorra y dos en Portugal tenía tres meses para solventar su situación financiera lo que no se ha producido. El pasado viernes terminó el plazo para sindicar una opción de crédito para una deuda de 64 millones de euros con las once entidades financieras.
Los sindicatos temen un fuerte recorte en el número de trabajadores mientras que la empresa no resuelva la situación, aunque también reconocen que “la entrad en un proceso concursal no significa que esté en quiebra” y señalan como la causa de la situación que vive la empresa, que llegó a ser una de las primeras de España en su sector, se debe a la “coyuntura de crisis que afecta especialmente a la construcción” tanto pública como privada.
Castelo es una de las empresas del emporio empresarial fundado por José Pérez Leirós y que da empleo a 220 trabajadores en las fábricas y oficinas técnicas que tiene en Porriño y Coirós. En el resto de las plantas tiene una plantilla de otros 150 empleados.
Durante este año la empresa ya había presentado un ERE extintivo que afectó a 18 trabajadores de Pretensados del Louro y uno suspensivo para la totalidad de la plantilla que se ejecutó durante 45 días y que afectó 105 trabajadores.
La situación laboral en la empresa se complicó en los últimos meses y el comité decretó conflicto colectivo por los impagos de salarios y las pagas extra de julio e incluso la empresa llegó a adeudar las nóminas de agosto.
Cierre en AndorraPrefabricados Castelo cerrará la planta que tiene en el Parque Empresarial de Andorra de forma inminente, al ser considerada la menos productiva del grupo. Esta empresa adeuda a dos de sus proveedores 600.000 euros.
Por el momento, la planta andorrana será la única sobre la que pesa una decisión de cierre mientras que el resto permanecerán activas, eso sí con menos personal, hasta que la compañía supere el concurso de acreedores. La planta  llevaba solo un año y medio funciona
ndo. Estas instalaciones, que emplean a un total de 25 trabajadores, fueron puestas en marcha en 2008 tras una cuantiosa inversión de 18 M€.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Más concursos. Castelo exige apoyo a Industria.

Visto en La Opinióncoruña

Los trabajadores de Prefabricados Coirós reclamaron ayer en Betanzos que la Xunta se implique en salvar la empresa y sus empleos

Unos sesenta trabajadores de la fábrica del grupo Castelo Prefabricados Coirós se concentraron ayer a mediodía en la plaza irmáns García Naveira para exigir el apoyo público a los 70 empleados, que llevan dos meses sin cobrar y temen que la crisis que afecta a la empresa destruya los 240 empleos que el grupo empresarial genera en Galicia.

Los trabajadores, que se reunieron en las últimas semanas con representantes de la Xunta y de la empresa para intentar acordar un plan de viabilidad, exigen ahora que a la próxima reunión asista algún responsable de la Consellería de Industria con el que encontrar una solución de futuro para las fábricas del grupo y sus trabajadores.

La plantilla se concentró durante hora y media en la plaza, acompañada del teniente alcalde de Coirós y de un concejal de Betanzos, que mostraron el respaldo de las corporaciones municipales a los trabajadores. Durante la protesta, la alcaldesa de Betanzos, María Faraldo, se reunió con el comité de empresa y prometió interceder ante la Consellería de Economía e Industria para buscar una solución. El grupo Castelo acumula una deuda de 64 millones de euros, según los cálculos de la plantilla y ya ha solicitado el preconcurso de acreedores mientras negocia con las doce entidades financieras con las que tiene un crédito sindicado para ampliar el plazo de devolución. La banca ha exigido a los responsables de la empresa, la familia Pérez Leirós, que venda alguno de sus activos como condición para mantener la financiación, una propuesta que el jueves provocó un conflicto con los trabajadores de las empresas de O Porriño (Pontevedra), que se encerraron durante nueve horas en las instalaciones del grupo.

"Esperamos poder volver a reunirnos con la empresa y la Xunta el próximo lunes porque esto corre mucha prisa", advirtieron fuentes del comité de Prefabricados Coirós. Y es que el plazo para que el grupo Castelo decide si formaliza o no el concurso de acreedores concluye en octubre, sin que hasta ahora exista previsión de cerrar un acuerdo de refinanciación.